Como dijimos muchas veces ya, toda la idea del apocalípsis de 2012 empieza con la verificación de que el 21 de diciembre de ese año, llegará a su fin el Ciclo Largo, uno de los ciclos del calendario maya. Sin embargo, un detalle que debe ser considerado es que cuando llegaron los conquistadores españoles, el Ciclo Largo no era utilizado más por los mayas, y, por lo tanto, no es posible hacer una correlación directa entre ese calendario y el nuestro.
La mayor parte de los estudiosos modernos acepta un trabajo hecho por Goodman, Martínez y Thompson (conocido por GMT) que sustenta la previsión del fin del Ciclo Largo en 2012. Pero este trabajo no es el único. Segun un estudio de Herbert Spinden, el inicio del ciclo maya comienza 260 años antes, o sea que el tan temido día del Fin del Mundo ya ocurrió y ni nos enteramos.
Otros trabajos colocan la misma fecha mas adelante: por ejemplo George Vaillant agrega 260 días a los valores obtenidos usando la correlación GMT. Y ahora acabo de conocer un estudio de Andreas Fuls, geodesta del Instituto de Geodesia de la Universidad Técnica de Berlin que dice que el fin del Ciclo Largo será en 2220. Le pedí a Andreas una copia del trabajo para analizarlo con tranquilidad.
De cualquier forma es interesante ver como no tenemos ni siquiera seguridad de cuando podría ocurrir el evento, visto que los creadores del sistema ya no están entre nosotros. Resalto que ninguno de los profetas del 2012 es autenticamente maya. Pero, incluso si lo fueran, la cultura maya clásica que dio origen al calendario y sus ciclos está mayormente perdida desde antes de la llegada de los españoles.
Todo esto no hace más que reforzar mi convicción de que 2012 es sólo un mal entendido, una interpretación equivocada y amplificada en una época de débiles esperanzas.